Entrevista a Don Ramón Vega Salas

12.06.2013 20:49

 

Ramón Vega Salas  

11 06 2013

Entrevista realizada el 11 de junio del 2013. 

 

En 1944 al 48 fue mi llegada a Guácimo, con tan solo 15 años de edad,  llego con mi familia, papa,  mama, y 4 hermanos, en esos años la Iglesia católica se encontraba cerrada,  las compañías bananeras estaban cerrando la producción bananera,  el IDA, tomo los terrenos y los distribuyó lentamente entre la población, que en ese entonces Hera muy poca, en esos años eran ranchitos a la orilla del río,  en ese entonces mucha de la gente no tenía dinero ni para cercar los terrenos,   en un jornal se ganaba 7 colones, no existía comercio o muy poco, pero si existía una escuelita pequeña con tres maestros.

Don Enos Collins tenía un terreno en el bosque el cual  mi papa trabajabó para el cultivo de maíz.

Los principales productos de esos años fueron la madera, y el maíz que se desarrollaban simultáneamente,   en la finca se creaba un rancho a la orilla de los cultivos, y don Enos nos enviaba mercadería a cambio de los trabajos,  en esos entonces el paludismo estaba expandiéndose por toda la región, no existía  ningún centro médico, fue hasta mucho después que ya se podía viajar a Guápiles para poder recibir esos servicios.

En ese entonces se realizaba la cacería con mucha facilidad, se encandilaba y cueviava, las caza por lo general era venado y tepezcuinte, pizote, saíno, muchos de los animales que se apreciaban eran la danta, manigordo, loras, lapas, y muchas otras especies.

Llerres, era una de las aves más grandes que caminaba y que existían en gran cantidad, esas se casaban con turecas, el cebo para esa casa era el maíz, y se casaba para hacer sopa, toda la gente del pueblo practicaba este tipo de casa.

Luego de ese entonces regresamos al centro de guácimo, ya era un lugar más poblado,  para que mis hermanos pudieran estudiar en la escuela Manuel Maria Gutierres.

Estos estudiaron en el colegio y obtuvieron su grado de bachiller.

Participe en los comités que se encargaron de la construcción de la cruz roja y la iglesia Catolica. Y participe directamente en la construcción de la nueva iglesia católica y en la demolición de la antigua iglesia, Durante el gobierno de Carazo,  ayude también en la construcción del edificio actual de la cruz roja de Guácimo.

 

Con la madera de la iglesia vieja se construyó la bodega para la nueva construcción, otra se regaló.

 

Luego de eso entro a trabajar en comercio, puse una pulpería en el hogar, con 100 colones para la mercaderia, compre un terreno a 50 colones y a pago en la salida de calle 6,  se traía mercadería desde Turrialba vía tren, esto lo realizaba una vez por semana, luego de algún tiempo se pudo reducir los viajes a una vez por mes.

Luego un hermano menor, empezó a ayudarme con el negocio, después encontré problemas con el negocio, y decidí cambiarlo con  el mismo hermano por nueve novillos,  los cuales cuide en una finca de mi cuñado Mario Paniagua en Parismina,  luego los vendí todos los novillos en 9.000 colones,  empecé a trabajar en el cnp, en la secadora, como ayudante de arbañil,  con la ayuda de mi esposa que era conserje en la escuela se logro contruir una casa en la entrada del bosque.

Después de algún tiempo apareció la oportunidad de comprar un terreno en el centro de Guácimo,  a unos 100 metros de la Secadora, a un señor de nombre Miguel Sánchez, el negocio se realizó, compre el terreno en 25.000,00 colones, un terreno con un negocio, casa, equipo, e inventario, y tenia una patente de licores y otra de pulpería.  La cual empezamos a trabajar, les cuento que en ese entonces los granos se vendían a granel, con una cuchara se sacaba la cantidad del saco o del cajón de madera don se acomodaba ese grano y se pesaba en bolsas de papel para la venta (arroz, frijoles, azúcar, Sal, Harina) el café se compra en bolsitas en Turrialba. En el almacén de Rojas cortes, lugar donde molían el café. La manteca venia en latas grande de unos 50 kg, luego con una paleta de madera se sacaba y se depositaba en el recipiente que traía el cliente, después de algún tiempo aparecieron los tubos o bolsas plásticas de mantecas, en el caso de la natilla esta venia en galones de vidrio sellados, la natilla se mantenía refrigerada en una refrigeradora de canfín o en un enfriador eléctrico, se vendía por vasos. La mantequilla se compraba en barras, y en algunas ocasiones se vendían fracciones de esa barra. En 0.25 céntimos. En 2 reales.

 El negocio se abrió y en la pulpería se vendía tanto los suministros y granos como también licores nacionales y extranjeros, tiempo después se divido esta patente en dos una para licores nacionales y otra para licores extranjeros, este negoció se quitó porque el Banco Nacional  que tenía una oficina dentro de la Secadora se trasladó a otras instalaciones, en ese entonces se presento una caída en la producción del maíz, lo que generó una merma en las ventas del negocio, se realizaron varios intentos para sostener el negocio pero esto no fue posible, este se cerro en los años 90, una de las patentes aún está funcionando.